Ayer por la tarde llegué a Xinzo. Mis compañeras me estaban esperando y me habían preparado una merienda de bienvenida. Nos pusimos cómodas con unas zapatillas calentitas y merendamos cada una a su gusto. Chocolate, té, capuccino, no faltó de nada. Yo aproveché para coger el ordenador y cotillear en mi blog.
Me explicaron que ya había empezado el Antroido y que nos íbamos a divertir mucho porque aquí dura ¡5 semanas!. Mi mamá Diana me dijo que nos disfrazaríamos y que me tenía una sorpresa. ¡Me muero de la curiosidad!
Qué cómoda se te ve, con tus zapatillas de conejo! n___n
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